Especialistas dicen que es prioridad contar con esos medicamentos, como sedantes, relajantes musculares y anestésicos, entre otros.
Hay escasez de medicamentos, como relajantes musculares, sedantes, analgésicos y anestésicos, para los pacientes críticos que ingresan a las unidades de terapia intensiva, alertó la Sociedad Boliviana de Medicina Crítica y Terapia Intensiva (Sbmcti). Ante esta situación, los familiares de los enfermos de la Covid-19 deben peregrinar en busca de este tipo de fármacos.
“La situación de la pandemia está saturando las camas de terapia intensiva. Ya Cochabamba, Santa Cruz y La Paz tienen sus camas llenas y lamentablemente esos fármacos escasean”, aseguró el flamante presidente de la Sbmcti, Joel Gutiérrez, en una entrevista con Página Siete.
El especialista explicó que desde hace una semana, los especialistas del departamento de Oruro solicitaban los relajantes musculares, los sedantes, los anestésicos y los analgésicos para conectar a un paciente crítico a una máquina mecánica.
De acuerdo con el profesional de salud, lamentablemente como no se cuenta con este tipo de fármacos en el mercado, los familiares de los pacientes con coronavirus son los que buscan los medicamentos y deben peregrinar por las farmacias.
Gutiérrez explicó que la medicación en terapia intensiva no es la misma que se usa en las salas de internación o en una consulta externa. “Nosotros manejamos drogas que requieren una vigilancia y una supervisión permanente”, sostuvo.
El médico detalló que por cada paciente se requieren al menos 30 ampollas de Midazolam (sedante) cada 24 horas, en función de la respuesta que tenga cada persona a esa droga. Además se requieren cuatro a seis ampollas de relajantes musculares por día, pero si se dan por goteo continuo, se requerirán de 10 a 15.
Según el especialista, más allá de esos medicamentos, también requieren otros fármacos antimicóticos. “Todo eso se necesita no sólo en Bolivia, sino en el mundo, porque todo eso escasea”, sostuvo.
El representante de los intensivistas aseguró que esos son los insumos básicos para una atención adecuada en los cuidados intensivos. Por ello, de acuerdo con Gutiérrez, el Remdesivir “no es una necesidad esencial”, ya que los otros fármacos que fueron mencionados antes son los que realmente necesitan los enfermos críticos y son de alto requerimiento.
Con una postura similar, Adrián Ávila, miembro de la Sbmcti, explicó que la escasez de estos fármacos se arrastra desde la primera ola de la pandemia de la Covid-19. “Estamos manejando otros que no son los adecuados, pero que tratan de sustituirlos”, indicó.
Estos medicamentos hacen que el enfermo pueda soportar la intubación para recibir el apoyo de un respirador mecánico. “El 90% de los pacientes que ingresan a terapia intensiva necesitan ventilación mecánica y para que el paciente reciba un tratamiento adecuado con la máquina, requiere estar bien sedado en niveles clínicos y relajación muscular”, dijo Gutiérrez.
Ante esa situación crítica, la Sociedad se reunió con el Gobierno hace 11 días por Zoom para que se brinde el apoyo necesario. Además, el 30 de diciembre se definieron las cantidades de los insumos para que las UTI cuenten con ellos.
“Estoy esperanzado con ello”, dijo Gutiérrez. Indicó que se sabe que el trámite es muy burocrático. Recalcó que es muy urgente contar con esos insumos. Se requieren también bombas de infusión, equipos de ventilación y sueros fisiológicos.
Hasta hace unos días, tres departamentos: La Paz, Cochabamba y Santa Cruz declararon su ingreso a la segunda ola de la enfermedad. Según los criterios de las autoridades nacionales, el 5% de los pacientes infectados llegan a terapia intensiva y el índice de mortalidad es alto.
Ávila dijo que en esta segunda ola nada cambió en las unidades de terapia intensiva, respecto a la primera. “Estamos igual y recién ingresamos a la etapa crítica”, indicó.
Fuente: Página siete