DJ, productor musical, creador de la discoteca Forum y actor de filmes y programas como Esta boca es mía.

Milen Saavedra / La Paz
Locutor, DJ, productor musical, actor, cómico, dueño de Forum y empresario, por cuatro décadas Luis Alberto Toto Aparicio se dedicó de lleno al mundo del espectáculo. La noche paceña perdió ayer a uno de sus más grandes impulsores, pues falleció a causa de una complicación de en el estómago, por la que estaba hospitalizado.

Su última publicación en Facebook fue de agradecimiento. La semana pasada hizo una campaña para que le donen sangre y el viernes escribió: “Mil gracias a todos y cada uno, gran campaña. Sangre de sobra y sobre todo deseos, vibraciones, energía y mucho amor. No puedo ser más feliz. Gracias a todos”.
Aparicio se hizo conocido como DJ en la década de los 80 , era parte de la generación de Ramiro Tarifa, Rodolfo Landaeta y Kiko Claure. Luego, llegó a la televisión a través de los exitosos programas cómicos Cabo de risa y Esta boca es mía, fue conductor en la Red ATB y paralelamente incursionó como actor en cine y teatro.

“Lo conocí en 1994 en el primer programa de Esta boca es mía, trabajábamos junto a Beto Barragán. Grabábamos las voces en su estudio, donde tenía una colección gigante de CD y discos. El elenco en ese momento eran él, Ronald Irene, Giovana Chávez y yo”, recordó la emprendedora Claudia Cárdenas.
En esa época, Aparicio también creó y ejerció como gerente de la discoteca Forum (que cerró el año pasado). “También se dedicó a producir conciertos y fiestas. Siempre impulsó la noche. Estaba dedicado a que la joda en la ciudad no se muera, que la gente se divierta. Era un trabajo sacrificado, pero él lo hacía con la mejor actitud”, agregó Cárdenas.

En los últimos años, Aparicio apoyó nuevos emprendimientos como los locales Backstage y Beer Garden, además de una importadora de mariscos. También, en 2014, fundó la Professional DJ Academy junto a Dj Orlando. “Ayudó a cientos de bandas, DJ, artistas. Era la persona menos egoísta que conocí en mi vida”, destacó Cárdenas.

Fuente: Pagina Siete.