
LA CLAUSURA DEL LENOCINIO, EL 21 DE FEBRERO.
La Fiscalía Departamental de Cochabamba instruyó el cambio de la fiscal de materia que estaba investigando los delitos presuntamente cometidos en el lenocinio de Quillacollo La Casa de Senet. La concejala Angelina Zeballos lamentó este cambio y dijo que existe “una mano negra política en este caso”. Comunicación de la Fiscalía dijo que “el cambio obedece a ajustes generales y no en función de los casos”.
Zeballos anunció que solicitará un informe al Fiscal Departamental sobre cuáles fueron los motivos del cambio de la fiscal, pues ya verificó que, desde el 4 de abril, Prado trabaja como fiscal de flagrancia de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de Cochabamba, y fue alejada del municipio de Quillacollo, donde fungía como fiscal de materia y asignada al caso del lenocinio.
“Ella ha tomado el caso a denuncia de vecinos y medios de comunicación. Estaba haciendo un trabajo objetivo, profesional. Y ese creo que fue el problema. Este es un caso muy delicado y polémico. Pediré informes a través de las asambleas porque he hablado con los vecinos y la decisión de Fiscalía ha caído como un balde de agua fría. Todos se preguntan, ¡qué se pretende ocultar? Los verdaderos dueños de este local, ¿tienen tanto poder que pueden hacer cambiar a autoridades?, inquirió.
El 21 de febrero de 2019, la fiscal de Quillacollo Cynthia Prado acudió al operativo ejecutado en la Casa de Senet, luego de que vecinos y padres denunciaran que se estaba rifando a 100 mujeres como si fueran objetos. La fiscal entrevistó a las mujeres que eran explotadas sexualmente; a un adolescente que estaba allí y a los vecinos. Prado también verificó que el lenocinio obtuvo una licencia de manera irregular (sin la aprobación de las bases), que funcionaba cerca de un colegio (lo que está prohibido) y en una superficie mayor a la permitida.
Fuente: Opinion.